Caracteristicas sucesion ab intestatus ius honorarium derecho romano
Este cambio reflejaba una nueva concepción de las relaciones familiares en la sociedad romana.
El ius honorarium consideraba el parentesco de sangre, el cognatio, como base para la herencia. Este sistema dual permitía una evolución del derecho sucesorio romano. Se otorgaba la bonorum possessio sine tabulis, concediendo la posesión de los bienes al heredero pretorio. El ius civile los excluía si no estaban bajo la potestad paterna al momento de la muerte.
El ius honorarium en la sucesión ab intestato introdujo cuatro clases de herederos. Si un heredero de una clase no aceptaba la herencia, pasaba a la siguiente clase. Dejó de primar la familia agnaticia, basada en la potestad paterna. Este sistema permitía una mayor justicia distributiva en la herencia.
Los liberi, los legitimi, los cognati y el cónyuge eran llamados sucesivamente. La bonorum possessio sine tabulis era una herramienta fundamental para lograr la equidad. Esta concesión se basaba en criterios de equidad y parentesco, ampliando el círculo de herederos. El ius honorarium modificó la noción de familia en el derecho sucesorio.
La sucesión ab intestato en el ius honorarium suplía las deficiencias del ius civile. El ius honorarium reconocía sus derechos sucesorios, corrigiendo una injusticia evidente. Ambas normas convivían, aunque la pretoria tenía primacía en la práctica.
Primero, los liberi, hijos emancipados o no. El edicto del pretor establecía el orden de llamamiento a la bonorum possessio. Se introdujo un orden de llamamiento sucesorio más amplio y flexible. La bonorum possessio sine tabulis era un remedio pretorio ante la falta de testamento. Esto consolidaba la posición del heredero pretorio y le otorgaba la seguridad jurídica necesaria.